lunes, 22 de febrero de 2010
El mito de la Revolución (franc)cesa.
(¡qué tuvo de francés, el golpe de estado contra Luis XVI en 1789!)
Alejandro R. Piacentini - Consejos útiles 452 - 28.12.07
Los financistas de la "Revolución"
El "espontáneo estallido" de la llamada Revolución Francesa, fue un mito, el cual trata de ser atornillado en la conciencia colectiva como que fue una "gloriosa" toma de la Bastilla, por el pueblo de París, lo cual es falso. Este mito es increíblemente mantenido cuidadosamente, desde hace mas de 200 años, por historiadores oficiales, políticos e incluso repetidas por maestros y profesores y surge de un propósito deliberado de envenenar las conciencias de las actuales y futuras generaciones.
Muchas veces tuve oportunidad de estar en París y en la campiña e incluso hablar y discutir con profesores de historia y desconocían, incluso negaban, sin fundamento ni información, las conclusiones y hechos que ya son evidencias y no meras especulaciones.
Muchas veces, varios de ellos me discriminaban porque decían que el suscripto no era francés, y que no les iba a enseñar a ellos, su propia historia. Yo solo les pedía que reflexionaran sobre quienes se habían beneficiado con la supuesta revolución y quienes ó quien era dueño hoy de más del 50% de las empresas francesas, quienes controlan los sindicatos y las universidades y que influencia ejercen sus dueños en el planeta, por medio de la prensa monopólica y la alta finanza no ya francesa, sino de alcance internacional. .
Es obvio que al subir al trono en 1774 Luis XVI se encontró con un Tesoro exhausto y una renta muy hipotecada. Ya en 1769 tras el alejamiento de Choiseul, Luis XVI nombró contralor general al abate Terray, quien prudentemente comenzó haciendo una auditoría encontrando 100 millones de deuda exigible atrasada (¿algún parecido con la situación de nuestra deuda externa ?) El abate no encuentra ni un solo escudo en la caja, un presupuesto de gastos por 220 millones y una recaudación prevista de 157 millones, o sea un déficit de 63 millones y con la amenaza de una guerra hispano-inglesa. Los impuestos ya eran elevados.
A pesar de los esfuerzos de LUIS XVI por ahorrar (si ahorrar y no despilfarrar como lo quieren hacer ver) a pesar de las tentativas del "liberalismo" de Turgot, el déficit no cesó de crecer, sobre todo después de la guerra de la independencia de EE.UU y de las nefastas y traidoras medidas del ministro Necker.
La nobleza dueña de tierras, gozaba del respeto y estima de la población rural, a su vez muchos tenedores de tierras pero no-nobles, arruinados por el escaso rendimiento de sus tierras, caían en manos de usureros, burgueses industriales conocidos como nuevos ricos y sus aliados los financistas, apoderándose éstos de títulos y privilegios.
El Rey quería poner freno a estos abusos, incluso de otras clases como la nobleza de toga que cada día reclamaban más y más privilegios. La nobleza de toga veía en una futura revolución la oportunidad para imponer sus propias ideas y privilegios y no cesaba de transmitirlos a los parlamentarios, lo mismo que la nobleza de espada.
Vemos que la ceguera existe entre las propias clases privilegiadas que, actúan como LA FRONDA si fuese necesario, para obtener lo que no podían con presión al Rey. Incluso vemos que ellos mismos serán víctimas de la misma Revolución, que propiciaron.
El Rey quería una distribución de impuestos más justa, haciendo que todas las clases sociales pagaran, y la nobleza y el clero influyeron en el parlamento de París, para oponerse al edicto ó decreto del Rey del VIGÉSIMO; se invocaba la miseria para no gravar a estas personas, cuando estaban en "plena prosperidad".
El personaje del obeso industrial que maneja millones y da órdenes a centenares de obreros existe ya mucho antes de la revolución, y es esa burguesía (advenedizos que nadie sabe de donde sacaron el dinero para tener plantas industriales) temerosa de perder sus privilegios y no-pago de impuestos, los que impulsarán la revolución, que incluso, llegado el momento también se los comerá a ellos. Solo los industriales de origen ateo, hereje y francmasón, no sucumbirán a la revolución.
La burguesía financiera, 100% de ella atea (sus riquezas provenían del contrabando, que es a lo que se dedicaban antes de ser financistas) controla todo el poder. Los contrabandistas más conocidos de Francia e Inglaterra, eran los Rothschild, luego devenidos en financistas ilustres y poderosos.
En 1784 apenas 5 años antes de la revolución, después de la bancarrota parcial del estado francés por causa de la Guerra de Sucesión en España (84 años antes), la Cámara de Justicia castigó severamente a los financistas y le dio a la opinión pública una satisfacción moral (como debería darse a los ahorristas de Nito Artaza, por ej). El pueblo pudo lapidarlos públicamente y se ordenó la restitución al estado de 262 millones. A partir de este hecho la francmasonería, entra en mortal desacuerdo con la monarquía y condena a la desaparición al régimen de Luis XVI.
Necker ,una historia nefasta para la Francia libre
La llegada de Necker al poder en 1776 daría el triunfo a los financistas de todas formas. Este ginebrino ingresa al banco de Jacques Vernet a los 16 años, dos años más tarde ya se distingue por su tenacidad, se convierte en Calvinista y Francmasón, mientras dura la guerra entre Francia e Inglaterra compra y vende papeles ingleses, que le dejan 1.800.000 libras de beneficio, en detrimento de su propio país. Esto le da reputación de hombre ilustrado y respetable.
El Rey le ofrece el cargo de ministro, pero Necker que es protestante (ateo en realidad) es nombrado Director General de Finanzas, cargo que le bastaría para destruir a Francia y llevarla a la Revolución, rechaza honores, títulos y retribuciones, el pueblo Francés queda deslumbrado (nada sale más caro que un empleado, que no quiere que le pagues)
Necker actuó como banquero, (no como hombre político) enriqueciendo a sus amigos y concedió créditos para todo tipo de temas, gastos, pensiones, caprichos, equipamiento de FFAA, emitió rentas por sorteo, rentas vitalicias sin depósitos previos, billetes de premio sobre propiedades rurales, rentas sobre París, préstamos sobre los estados de Languedoc, en Bretagna, en Provenza, en Artois, y un gran empréstito por premios de 25 millones de francos, sin respaldo.
Pierre Gaxotte dice que Necker tuvo cuidado, en proponer inversiones a los acreedores de Francia, muy ventajosas, pero ruinosas para el estado; estamos hablando de 1781 aproximadamente.
¿Algún parecido con el endeudamiento con la Banca Baring de 1864, cuyas conversaciones comenzaron con la caída del virreinato en Buenos Aires entre 1818 y 1824 ?
Pero el astuto hereje, sigue con sus maniobras conducido intelectualmente por la secta a la cual pertenece y sus jefes, entre ellos el Sr.Rothschild.
Alquila el correo a privados, aprovecha sus depósitos, suprime a los recaudadores de dominio, a los intendentes de finanzas y suscribió el empréstito con el apoyo de todos los banqueros, a quienes con semejante administración, se les facilitaba los manejos y debilitaba los controles.
Donde Necker sobrepasa toda audacia es cuando presenta su INFORME AL REY, el 17.2.1781. En forma parcial y tendenciosa omite la verdadera situación financiera del reino. Este informe es una apelación al pueblo cuyos efectos perniciosos sobre esta monarquía aun no pueden preverse.... Palabras sabias que describen ya la intromisión de las FINANZAS en la Política.
Necker de todas formas es alabado por sus clientes y exige al Rey su entrada al Consejo, sino renunciará, cosa que el Rey acepta y deja pasmado a Necker.
Inmediatamente se desata una campaña instigada por periodistas, escritores, panfletistas que frecuentaban el círculo de Madame de Stael. Los reemplazantes de Necker, a su vez, son atacados violentamente por el klan neckerista y rothschildiano.
La especulación de acciones de la Compañía de las Indias gracias a las 6.900.000 libras proporcionadas por el Tesoro a los agiotistas, dio lugar a que Mirabeau favorable a Necker pero decepcionado por "haberlo dejado en todo tipo de aprietos" publicara su DENUNCIA DE AGIO DE PARÍS, al REY y a la Asamblea de Notables publicada en 1787. (2 años antes de la caída).
¿Cómo se pueden efectuar operaciones tan grandes y escandalosas y sus responsables salir ilesos? ¿Quién es la mano negra que los protege? (¿alguna semejanza con el corralito y la devaluación de 2001-2002?) El pueblo francés, había sido herido profundamente en sus intereses, ¿cómo explicaba esto el Rey ?
Necker de todas maneras recibe un duro golpe cuando Calonne (sucesor de Necker) desde Londres en Abril de 1787, refuta el "Informe al Rey" de Necker, publicando su RESPUESTA AL DOCUMENTO DEL SR NECKER.
Calonne objeta a Necker haber incluido "beneficios eventuales" que nunca habían entrado, un informe de situación no es un informe de esperanzas. Necker pretendía mostrar al Rey como rebosante de dinero cuando en realidad no lo era. No se puede calcular lo que se posee, sin antes haber deducido lo que se debe.
La opinión pública, confundida por el periodismo obsecuente y los panfletistas a sueldo de Madame de Stael, lograban que la gente común, reclamara la vuelta de Necker a las Finanzas, para que el país se calmara financieramente, porque corrían todo tipo de versiones. (¿Algún parecido con la vuelta de Cavallo al gobierno de DE LA RÚA?) ¿No es cierto que las similitudes de – modus operandi - espantan?
Necker a pesar de todo vuelve a manejar las finanzas del reino, el Rey no tiene otra salida para apaciguar a la gente, que está harta que le metan la mano en el bolsillo.
Corre 1788 y Necker ya calcula que la deuda absorberá unos 318 millones, o sea el 50% del presupuesto. ¿Y quienes serán los prestamistas que lo sacarán del aprieto ? por supuesto que los beneficiados con la estafa de LA CIA DE INDIAS, ¿quienes más ? y más deuda, traerá más deuda.
Para 1789 Necker ha previsto que la deuda sea el 62% de los ingresos del reino, ¡una bomba de tiempo! El costo de vida sigue subiendo, los burgueses comienzan a despedir gente de las industrias, que están situadas mayormente en la campiña y comienzan a expulsar a los desempleados hacia París, que es el último bastión, donde se puede conseguir un trabajo.
Es ese el momento, en que el Duque de Orleans comienza a planear la caída de su primo LUIS XIV, agitando a las masas por medio de panfletistas pagados por él, ó por el CLUB DE LOS 30 ó el CLUB DE VALOIS, de las sociedades de pensamiento y de la francmasonería.
La bolsa tiende a la baja, agitadores desempleados en las calles, panfletistas comienzan a perturbar el orden.
Pero ya no se trata de el pueblo contra el Rey, sino del Tercer Estado (algo así como la cámara de diputados) contra el Rey, que ante la catástrofe financiera comienzan los egoísmos y a salvarse quien pueda. Se teme la bancarrota. El Tercer Estado es donde las finanzas tienen más adeptos y tienen en la mano, casi todos los triunfos.
De sus 575 miembros, 272 son abogados que a partir del 6/5/1789 asumirán el titulo de Diputados de las Comunas.
Cuentan como mínimo con 270 VOTOS a favor, que velan por los intereses de la nobleza y cuentan con el 20% de los votos de los curas enciclopedistas, sobre los 291 representantes del clero.
El General Bonaparte opina que nadie hizo más por derrocar al Rey que Necker y sus amigos financistas; lo mismo dice Jacques Bainville.
Luis XVI toma precauciones, reúne 25,000 soldados en Versailles es el 20/6/1789, el 9/7/1789 la asamblea común ó del Tercer Estado, pretende autoproclamarse ASAMBLEA NACIONAL CONSTITUYENTE y el Rey la disuelve.
El 11/7/1789 el Rey vuelve a destituir a Necker, la bolsa decide cerrar el lunes y nadie sabe como el Rey hará frente a los pagos que vencen el 12.7.1789, del empréstito que armó Necker.
Sigue la agitación, los billetes de la Caja de Descuentos, se deprecian y pasan de 4.265 a 4.165 (¿alguna coincidencia con la cada de De la Rúa?)
Los banqueros mandan a sus empleados a que entreguen dinero y armas a los acreedores, la mayoría, gente de clase media y alta (nadie puede pensar que los pobres inviertan en la bolsa) Las armas se encuentran depositadas en LES INVALIDES, las ha financiado Necker con dinero de Rothschild y el Duque de Orleans.
Rivarol dice; los capitalistas querían que Necker armara una revolución, destituyera al Rey y les devolviese sus inversiones.
Lafayette y Boilly se dirigieron temprano el 13.7.1789 a la Casa de Orleans, cuentan con la ayuda financiera además de los Delessert, Prevoteau, Coindre, Boscary, sobornan a los soldados del Rey, crean batallones populares con gente de clase media.
En el Palais-Royale, el Sr Camille Desmoulins subido a una silla distribuye escarapelas color verde, como la librea de Necker, se clausuran los espectáculos, el día 13 continua la entrega de 28.000 fusiles, el 14 de Julio, el historiador Albertz Mathiez, cuenta que el BANQUERO Etienne Delessert (fundador de la 1ra Cía de Seguros contra incendios) manda un memo al Comité de Seguridad, avisando que sale con toda su familia a Les Invalides para munirse de armas. (no sabía que el pueblo descripto como pobre por los historiadores, sean tan ricos)
El 14 de julio, Coindre (invsersionista) describe que fue a la Bastilla con otros inversionistas y ahorristas a apoderarse de la espada del sargento mayor; en la Bastilla hay tan solo 8 presos (la prensa había hecho creer que había miles y que había opresión); esa misma noche la muerte de Flesselles y la toma de la Bastilla hacen temer que la revolución haya cambiado de dueño, sin embargo Bernard Fay dice que el poder no pasó de las manos del Rey a las bandas de Felipe D´Orleans (su primo) sino a la guardia nacional de LA FAYETTE respaldada por el dinero de la alta finanza. Luego cuando la revolución haya terminado, las finanzas también acabarán con D´Orleans.
El 17.1.1793 casi cuatro años después de su caída, la convención. por 361 votos sobre 720 votantes (por un voto) condenó a Capeto a muerte.
Arthur Conte relata que la severidad glacial de Dornier, el convencional más rico de todos, al votar en contra en la apelación de 380 contra 310 votos, no le sorprende.
El pueblo nunca hizo una revolución en Francia el 14.7.1789, sino que se trata de un crimen ateo, hereje y perpetrado por la peor de las castas, la ALTA FINANZA INTERNACIONAL.
Hasta el día de hoy, ese poder no ha dejado el trono, es más, lo ha extendido.
Hoy se llama Globalización.
Cordialmente
PS. Inmediatamente después de la revolución, los impuestos subieron el 50% y el costo de vida trepó a niveles sorprendentes. El pueblo estaba mejor con la monarquía.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarNo es Luis XIV, es Luis XVI
ResponderEliminarLo sé, el texto original tiene esa errata que paso a corregir a ahora mismo. No sé en que estaría pensando cuando lo escribí aquí.
ResponderEliminarGracias.